Lo único que puede hacer una chica que no puede hacer nada - Capítulo 3

1. Se encuentra con una chica en ropa interior.
2. El lugar es mi cuarto de baño.
3. La chica es una linda gal que está en la misma clase que yo, en el asiento de
al lado.
4. Esa gal se ha convertido en mi hermanastra por parentesco.
Además,
5. La chica resulta ser la admirada ilustradora de la que estoy profundamente
enamorado.
Esto es malo.
No puedo seguir este giro repentino.
Mi cerebro está a punto de sobrecalentarse nuevamente.
“¿Cómo sabías?” pregunta Ichinose Ryokaze mientras sigue sobre mí.
—Eh, ah. No. Lo sabía. Por casualidad. Tus ilustraciones.
—No deberían ser tan famosas. No creo que tengan tanta popularidad.
—No, ¿qué estás diciendo? ¡Tienes miles de seguidores en Twitter! ¡Así que, por
supuesto, algunas de tus ilustraciones llegan hasta mí! Además, antes de eso…
Algo en mi mente cambió de manera extraña.
Después de que una sucesión de situaciones altas en calorías me asaltaran, este
fue el golpe final. La chica más popular de la clase se convirtió en mi hermanastra
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por cortesía y además resulta ser la ilustradora más candente en este momento.
Creo que es inevitable que mi interruptor se active.
—El motivo es extraño, parece que ha metido un montón de cosas diferentes, y
aún así, el equilibrio es perfecto. Su sentido del color es excepcional, y maneja
composiciones difíciles con facilidad. Hay tontos que critican incluso las
ilustraciones de estilo sello, y tontos que dicen cosas como que hay poco
fanservice o que debería hacer más obras derivadas, pero dejando a un lado a
esos tontos, permíteme dar mi conclusión. ¡Para mí, Kokoro Pyonpyon es una
diosa! ¡Mi salvadora! Una supernova que ha aparecido en el caótico mundo de
la ilustración en línea!
—… ¿En serio?
—Sí, de verdad.
—Ya veo. Gracias.
Ella me sonrió.
¡Ah, en serio!
¡Es tan linda!
Tiene un toque de hermana mayor, otro de hermana menor, uno sensual y otro
despreocupado.
Es una sonrisa que contiene tantos elementos diferentes, y Ichinose Ryokaze
generalmente puede llevar cualquier cosa a un buen término con solo esa
sonrisa.
Esto es literalmente una trampa. Hubiera sido mejor si hubiera renacido en un
mundo diferente. Además, ¿esta persona es en serio “Kokoro Pyonpyon”? ¿No
es un poco demasiado espectacular, como ganar la lotería? Para mí, tiene un
valor de alrededor de 200 mil millones de yenes, ¿sabes? No, no se puede
cambiar por dinero, es mucho más que eso…
“Por cierto,” me dijo Ichinose Ryokaze, quien estaba luchando por liberarse.
Con las mejillas un poco enrojecidas, se rascó la mejilla con el dedo y dijo,
—En esta posición, ¿quieres continuar?
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Ah, y ahí es cuando me di cuenta.
Esta posición.
Debido a mi combo de errores, terminé derribando a Ichinose Ryokaze mientras
cenábamos, dejándola en el suelo del comedor.
Dependiendo de cómo lo veas, o mejor dicho, si lo ve la mayoría de las personas,
podría parecer un caso problemático.
—… ¡Lo siento muchoooooooooo!
Inmediatamente me levanté de la posición dominante y, sin dudarlo, me incliné
profundamente.
Dos reverencias en un solo día… La vida es como una lotería, pero al parecer,
también incluye algunos boletos de mala suerte.
†
—Así que… Kokoro Pyonpyon-san es realmente mi diosa.
Después de un rato.
Después de que las disculpas fueron aceptadas, comimos lo que quedaba del
tazón de arroz chino, hice la limpieza (por supuesto, yo), y finalmente, en la sala
de estar donde pudimos relajarnos.
Ichinose Ryokaze y yo estábamos tomando café (que, por supuesto, preparé yo),
dando un pequeño descanso.
Por cierto, las posiciones en el sofá estaban bastante separadas. Aprendí que
es fácil cometer errores cuando la distancia es corta, así que era una respuesta
natural. Aunque Ichinose Ryokaze parecía insatisfecha y fruncía los labios.
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Sin embargo, no hay más remedio que aceptarlo… ¿O realmente está
insatisfecha? Lo he dicho muchas veces, ¿pero la distancia es demasiado
cercana?
—Ah, ya veo. Entiendo.
Mordisqueando una galleta, Ichinose Ryokaze asintió con aprobación.
—Entonces, realmente es una coincidencia increíble, ¿verdad?
—No es solo increíble…
Sosteniendo una taza de café en una mano, sigo estando atónito.
—¿No encuentras extraño pensar en ello? La persona que va a la misma
escuela, en la misma clase, en el asiento de al lado, de repente se convierte en
tu hermanastra desde hoy, y además es la ilustradora divina que admirabas… No
entiendo lo que estoy diciendo incluso ahora.
—Pero es la realidad.
—Sí, lo es…
Por cierto, ni mi padre ni Yuko-san han dado señales desde entonces. Por
supuesto, en este momento, probablemente estén disfrutando de la cena en el
avión. Por ahora, solo puedo atravesar la situación actual.
¿Puedes creerlo?
Hoy es el primer día de convivencia. ¿Cuántos eventos más sucederán? Mi
cabeza ya está saturada. No puedo pensar con claridad. Tal vez debería
echarme una siesta, reiniciarme y abordar todo desde ahí.
Hay muchas cosas que quiero preguntar y hacer, pero me rindo. No puedo más.
Ya… ¿podemos llamarlo un día y terminar aquí?
—Así que, en resumen, estoy pensando en irme a dormir pronto.
—Sí, suena bien. Ya es bastante tarde.
—Hay toallas y cepillos de dientes para los huéspedes, así que siéntete libre de
usarlos.
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—Sí, lo haré.
—¿Necesitas algo más?
—Hmm… vine sin pensar en nada, así que no necesito nada en particular. Pero
traje ropa para cambiarme, así que creo que estaré bien.
Tan despreocupada como siempre.
Realmente, es demasiado fuerte. No tiene miedo de nada.
Es demasiado valiente o, más bien, es una auténtica chica gal en cierto sentido.
—Bueno, de todos modos, solo voy a tomar una ducha rápida. Después, haz lo
que quieras de manera cómoda. La habitación de almacenamiento está lo
suficientemente ordenada como para poner un futón, al menos.
—Sí, suena bien.
—… ¿Hay algo de lo que te quejes?
—Bueno, eso…
Inclinando la cabeza ligeramente, ella habla.
—La historia de dormir en la misma habitación…
—… ¿¡Aún seguimos con ese tema!?
No puedo evitar soltar un comentario en voz alta.
—No, no. En serio, no hay nada de eso.
—¿Estás seguro?
—¡Seguro que sí!
—Pero eres mi onii-chan, ¿verdad?
—Ser el onii-chan no es una licencia para nada, ¿sabes?
—Hmm…
Una expresión de preocupación cruza el rostro de una confundida Ichinose
Ryokaze.
—No, que mas da. ¿Hay algo que te preocupa?
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—Sí, lo hay.
—¿Qué es?
—Bueno, es que…
Con un tono un poco avergonzado, ella dice:
—Me siento más cómoda cuando alguien se acuesta junto a mí.
—… ¿¡Qué tipo de razón es esa!?
No pude evitar hacer otra observación.
—No se trata solo de dormir en la misma habitación, ¡pero acostarse juntos está
completamente fuera de discusión! ¡La mera sugerencia no tiene sentido en
absoluto!
—No necesitas entrar en la misma cama, ¿sabes? Pero tal vez podríamos hablar
cerca de las almohadas.
—¿¡Eres un niño!? ¡Tu pensamiento es completamente infantil!
—Pero definitivamente dormire en la misma habitación. Es aterrador estar sola.
—¡Tu razón sigue siendo infantil! ¿Cuántos años tienes?
Le hice tantas observaciones como pude.
Ichinose Ryokaze me miró con desaprobación.
—¿Te opones tanto a esto?
—¡Por supuesto! ¡Lo que estás diciendo es completamente absurdo!
—¿Quizás estás pensando en algo pervertido?
—¿¡Qué!?
—Si te pones tan nervioso solo por dormir en la misma habitación, ¿onii-chan,
estás pensando en cosas pervertidas? ¿A pesar de ser hermanos, quieres hacer
ese tipo de cosas?
Bzz, bzz, bzz…
Sacudí mi cabeza intensamente.
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Verticalmente en mi mente.
Pero horizontalmente en la realidad.
No, no, eso es imposible.
Aunque digamos que somos hermanos en los documentos, en realidad somos
solo dos personas diferentes.
Un chico y una chica.
Bueno, no lo diré en voz alta. Siento que no es la atmósfera adecuada.
—Entonces, está bien, ¿verdad?
Ichinose Ryokaze deja de mirarme con enojo y sonríe.
—Si no hay cosas traviesas, entonces no hay problema, ¿verdad?
—B-Bueno, incluso si dices eso…
—Si no puedes decidir, ¿eso significa que estás pensando en cosas traviesas?
—N-No, nada de eso…
Recibo otra mirada enojada y respondo monótonamente.
—Tú eres mi onii-chan, ¿verdad?
—Por supuesto, existe eso.
—¿No es extraño?
—Por supuesto que sí.
—Si no lo haces, en primer lugar, ¿no hay ningún problema, verdad?
—Sí. Eso es correcto.
—Sí, está bien entonces.
Así era el rostro entrecerrado de Ichinose Ryokaze.
Esa expresión era increíblemente linda de manera prohibida, realmente
encantadora hasta el punto de dejar sin palabras, y me quedé mirándola
distraídamente. Y finalmente, perdí la oportunidad de argumentar en contra.
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No, no, pero ¿esto está bien?
No sé ya qué hacer. Me opongo bastante en serio, ¿sabes? El resultado de un
juicio sensato es esto, ¿no?
… Aunque, al pensarlo bien, no estoy realmente perdiendo, ¿verdad?
Más bien, ¿estoy ganando?
La top gal del aula, que se sentaba en el asiento al lado del mío, se convirtió en
mi hermanastra debido al nuevo matrimonio de los padres, y de repente nos
mudamos juntos. Además, resulta que ella es una famosa dibujante por la que
yo sentía admiración, y además, es del tipo que tiene miedo de dormir sola y le
gusta que le hagan compañía.
… Me sorprende a mí mismo. ¿Quién va a creer en una situación así?
Pero es la realidad.
Y una realidad en la que no puedo alegrarme sin reservas.
¿Pasar una noche entera en la misma habitación con Ichinose Ryokaze… en
serio?
Y además, ¿sin pensar en cosas subidas de tono, dices…?
Es imposible, incluso para mí, por absurdo que parezca.
Mejor aun, ¿no es más bien una forma de tortura?
¿Alguna especie de nuevo test de estrés? ¿Estoy siendo sometido a alguna
prueba?
“Bueno, pero sí”, dice Ichinose Ryokaze, como si se le hubiera ocurrido de
repente, ignorando mi angustia interna,
—¿No obtienes nada de esto, verdad?
—… ¿A qué te refieres?
—Esto es simplemente que hagas lo que quiero que hagas. No estás haciendo
lo que quieres que haga, ¿verdad?
—Bueno… si lo pones así, supongo que sí.
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—Así que no estás obteniendo nada. No es justo.
Ella señala alternativamente hacia sí misma y hacia mí.
… Pero, espera, ¡yo sí estoy obteniendo algo!
¡Pasando una noche entera en la misma habitación que Ichinose Ryokaze!
Si digo que esto no es un gran beneficio, ¡seguro que me apuñalará! Si mis
amigos A y B se enteran, creo que estarían dispuestos a aniquilarme a cambio
de mi vida.
—¿No haces tanto la cocina como la limpieza, verdad?
—Bueno, sí. Eso es correcto.
—Entonces, esto es un trato justo. ¿Hay algo que quieras que haga por ti?
Ichinose Ryokaze inclina la cabeza ligeramente, un gesto que es francamente
lindo, y así sucesivamente.
Pero me di cuenta de algo. Ella tiene cierta inocencia, ¿sabes? O más bien, una
especie de pureza juvenil.
A pesar de eso, tiene una actitud fuerte como una chica de moda. Su apariencia
es la de una gal fuerte, con un gran busto, creando una combinación de pureza
e sensualidad.
La evaluación de Ichinose Ryokaze en mi mente ha vuelto a subir. Aunque no
puedo expresar mi alegría de manera directa en este momento.
—No, en realidad. No hay nada en particular.
Por ahora, solo negué con la cabeza.
Ahora, de verdad, lateralmente desde el corazón. Lo he dicho muchas veces,
pero esto es completamente excesivo. Mi cerebro ya no puede seguir si deseo
algo más allá de esto.
—Bueno, entonces…
Sin embargo, sí.
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Ella pensó un poco y susurró algo que ni siquiera había cruzado por un rincón
de mi mente, una idea que podría considerarse demoníaca desde la perspectiva
de mi individualidad.
—Vamos a hacerlo así. Si escuchas lo que digo, dibujaré cualquier ilustración
que desees con una sola condición: que cumplas con una solicitud mía.
†
—Jaja. Tu cama es bastante esponjosa, ¿verdad, onii-chan?
Ichinose Ryokaze, que se lanzó a la cama, parecía estar de buen humor mientras
verificaba la sensación del colchón. Es una idea demoníaca que no pude resistir.
No pude resistirme a la idea demoníaca.
En mi habitación, Ichinose Ryokaze en pijama. En serio. Parece que va a dormir.
Esta persona, en mi habitación.
¿No es el primer día?
¿No es demasiado cercano?
Que si tiene miedo de dormir solo, que si solo puede dormir bien cuando alguien
está con ella, incluso si tiene razones como esas. Aunque tenga ese tipo de
razones, ¿no debería mostrar un poco más de moderación?
¿Debería ser yo quien muestre moderación?
No, no, eso es imposible.
Después de todo, es un artista divino.
¡Soy un seguidor devoto de sus ilustraciones!
Ese dios del dibujo, ¿saben? Ella dibuja ilustraciones según mis solicitudes.
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Cualquier persona que tenga un artista venerado debería entender. Incluso si no
es un artista divino, digamos que es tu ídolo favorito, ¿verdad? Si esa persona
te dice algo como “Voy a cantar una canción solo para ti, así que escucha lo que
digo”, lo aceptarías, ¿verdad?
—… La conversación de antes, ¿es en serio?
Parado en la entrada de mi habitación, me aseguro.
—De verdad vas a dibujar una ilustración para mí, ¿verdad? ¿Kokoro Pyonpyonsan va a hacer una ilustración para mí… eso es en serio, ¿verdad?
—Sí, es en serio.
Sentada en el borde de la cama, Ichinose Ryokaze sonríe.
—No puedo dibujar cosas imposibles, pero dentro de lo que puedo, lo haré con
tu solicitud. También terminé el dibujo del conejito hasta que estuvieras más o
menos satisfecho.
… La ilustradora divina Kokoro Pyonpyon es del tipo que publica activamente
ilustraciones en proceso de finalización. Mucho antes de que comenzara a
seguirla, ella compartía generosamente bocetos y esbozos, de manera audaz y
abierta, constantemente en público.
Aunque en Twitter apenas compartía detalles sobre su vida privada, la Kokoro
Pyonpyon que tenía frente a mí coincidía bastante con la que había imaginado.
Además, me mostró la pantalla de su teléfono.
Lo que vi allí eran numerosos archivos de imágenes que incluían herramientas
de dibujo de aplicaciones y datos en proceso de producción, y confirmé una vez
más la verdad de que Ichinose Ryokaze = Kokoro Pyonpyon.
Pruebas irrefutables.
Me di cuenta nuevamente de la grandeza de la lotería que gané.
—… Entiendo.
Tomé una decisión firme una vez más.
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No hay vuelta atrás. Después de que me colgaron una zanahoria gigante frente
a los ojos, no queda más opción que correr tan lejos como pueda.
—Vamos a dormir en la misma habitación. Y luego, ¿vas a dibujar una ilustración
para mí, verdad?
—Sí.
—Entonces, el trato está hecho. Voy a traer un futón desde la habitación de al
lado.
—¿Eh? ¿Y acerca de dormir juntos?
—Eso es realmente imposible. Hasta dormir en la misma habitación es justo al
límite. Este es mi último punto de compromiso. No puedo aceptar más
negociaciones que esto.
—… Hmm.
Mirada intensa.
Y luego,
—Bueno, está bien. Dejemos el dormir juntos para más adelante como una
diversión.
Ichinose Ryokaze sonríe con malicia.
Como era de esperar, ese gesto es extrañamente seductor, y apresuradamente
me alejo diciendo, “Entonces, voy a traer el futón”.
Bueno.
Pero aun así, ¿no es la distancia un poco… cercana? ¿Es algo común en todas
las chicas gal?
Unos minutos después.
Apago la luz de la habitación.
Preparé un futón en el suelo, con Ichinose Ryokaze recostada en la cama.
—Oye, oye.
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Una voz suena en la penumbra.
—Onii-chan, cuéntame una historia.
—… ¿Vas a dormirte pronto, no?
—Es que puedo dormir mejor si me cuentas una historia.
—¿Eres un niño?
—Pero está bien ser un niño.
Me responde imitando la voz de un niño.
Realmente parece un niño, en serio…
A pesar de ser una chica gal. A pesar de tener un gran busto.
—Bueno, aunque sé que es improbable…
—¿Qué?
—¿Siempre eres así? ¿Con tu madre, Yuko-san, haciéndote dormir y
acostándote a dormir?
—Sí.
—¿En serio?
—Cuando mamá está en casa, pero ella siempre está ocupada.
Hmm.
La idea de una chica gal siendo arrullada y durmiendo por su madre.
Superando la brecha, ¿esto ya es incomprensible? O sea, es así.
¿Es esta su vida cotidiana todo el tiempo?
En ese caso, ¿la madre, Yuko-san (que está ocupada y no está mucho en casa),
se encarga bastante profundamente de cuidar a su hija, verdad?
Si lo piensas bien, siempre falla al intentar cocinar, falla al intentar limpiar… y
además olvida los libros de texto en la escuela con una frecuencia ridículamente
alta.
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Aunque tiene la apariencia de una gal perfecta, ¿en realidad es una completa
inútil por dentro?
Y aún así, no se disculpa y tiene una personalidad fuerte.
Además, posee el súper talento de ser un dios del dibujo.
Realmente no tiene sentido.
Es como una caja de sorpresas. Su sentido de asombro parece haberse
adormecido por completo.
—Entonces, ¿hablamos?
—… No tengo un tema interesante.
—Cualquier cosa está bien.
—Bueno, entonces… ¿puedo escuchar sobre Kokoro Pyonpyon-san?
—¿No debería ser yo quien cuente esa historia?
—¿Está mal?
—Me gusta preguntar.
Aunque lo esté murmurando, parece que no es un no.
Entonces, puedo seguir conversando tanto como quiera. Incluso es bienvenido.
Como mencioné antes, Kokoro Pyonpyon-sensei es del tipo que rara vez revela
detalles de su vida privada. Es decir, esto es como una entrevista exclusiva de
un fan para su ídolo.
Es emocionante, ¿verdad?
—Bien, Kokoro Pyonpyon-san… uh, lo siento, es difícil de decir, ¿puedo llamarte
“KokoPyon”?
—Sólo llámame Ryokaze, está bien.
—Eso es un poco difícil. Entonces, ¿desde cuándo empezaste a dibujar
ilustraciones, KokoPyon?
—Mmm… ¿hace unos seis meses, quizás?
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—¿Seis meses? ¿Tu experiencia en ilustración es de solo seis meses?
—Sí.
—¿Y antes de eso?
—Mmm… jugaba un poco con amigos, dibujaba algo en ese entonces.
Puede ser solo mi impresión personal, pero…
Las chicas, a diferencia de los chicos, tienen mucho más talento para la
ilustración. ¿Quién no tiene la experiencia de que durante el descanso en la
escuela primaria, los chicos salen corriendo hacia el patio para jugar con la
pelota, mientras que las chicas se quedan en el aula dibujando…?
Probablemente todos tengan esa experiencia, ¿verdad?
Cuando ella dice “jugaba algo”, probablemente se refiere a ese tipo de cosas.
En otras palabras, es prácticamente una aficionada.
Y eso en solo un año.
Hasta el nivel en el que yo, que la adoro, la veo como una diosa.
—¿No es increíble? ¿En solo un año de experiencia en ilustración, eres tan
buena?
—Ehehe, gracias.
—¿No tienes un talento demasiado grande?
—Hay mucha gente más talentosa que yo, sabes.
Ichinose Ryokaze responde con modestia y tranquilidad.
Pero eso es probablemente modestia.
Es cierto que Ichinose no es del tipo que se destaca técnicamente. La limitación
de su estilo, que tiende a parecerse en ciertos aspectos, también podría ser un
inconveniente.
Sin embargo.
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Su manejo del color, sus líneas, su comprensión del espacio, la expresión de
luces y sombras, la forma en que resalta la textura con su pintura… la lista es
interminable, pero tiene varios talentos brillantes.
Es lo que se llama un tipo de “talento total”.
Tal vez no destaco técnicamente (aunque puedo dibujar más que
suficientemente), pero soy un dibujante con un talento único que otros no tienen.
¿Podrías entender un poco por qué me obsesioné?
—¿Cuál fue el motivo que te llevó a empezar a dibujar ilustraciones?
—… Oye, ¿esto es como una entrevista o algo así?
—Más o menos. ¿Cuál fue la razón para empezar a dibujar?
—Mmm… solo por diversión, supongo.
—Esa es una razón típicamente dada por alguien con talento excepcional.
—¿Eh? Pero no puedo evitarlo, es la verdad. Como que vi algunas ilustraciones
en la red y de repente comencé a dibujar, algo así.
—… Normalmente no es así, ¿verdad? Entre “ver ilustraciones” y “empezar a
dibujar”, debería haber varias etapas.
—No es así para mí. Puedo dibujar muchas cosas fácilmente con aplicaciones
gratuitas de dibujo. Además, en mi caso, pensar “quiero hacerlo” y pensar “puedo
hacerlo” eran prácticamente lo mismo. Descubrí que era divertido dibujar, puedes
hacer muchas cosas con la aplicación. Así que, de alguna manera, me enganché.
… Hmm.
Historias brillantes que salen a la luz con solo rascar un poco.
Sin usar ni pluma ni tableta, ¿y solo usando una aplicación? Probablemente,
¿está dibujando todo esto en su teléfono inteligente? Siempre la he visto tocando
su teléfono, pero nunca pensé que estaría dibujando ilustraciones. Incluso en la
escuela y todo.
Y con un impulso que surge simultáneamente de querer hacerlo y pensar que
puede hacerlo, descarga una aplicación de inmediato y la utiliza con facilidad.
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Además, dado que todo lo relacionado con las tareas domésticas resultó ser
catastrófico, parece que tiene una absoluta falta de habilidades para la vida
diaria.
¿No es esto un patrón típico de genio?
La mamá, Yuko-san, es una diseñadora mundialmente conocida, así que hay un
fuerte sentido de ser una persona elegida.
Y ahora, esa genio chica gal está durmiendo en mi habitación.
Lo he mencionado varias veces, pero ¿es esto algún tipo de fantasía?
¿Hay alguna posibilidad de que me ingresen en un hospital psiquiátrico por esta
línea de pensamiento?
Mientras estoy en silencio, Ichinose Ryokaze comienza a reírse.
—Es como si algo extraño estuviera pasando.
—¿Eh? ¿Qué pasa?
—A partir de hoy, somos hermanos, ¿verdad?
—… Bueno, sí. Supongo que sí.
—Ufufu.
—¿De qué te ríes?
—Fue divertido. Hasta hace poco, solo éramos compañeros de clase, ¿verdad?
—Bueno, sí… eso es cierto…
—Oye, ¿crees que esto es el destino?
—… Solo estamos siendo manipulados por nuestros padres, ¿sabes?
—Hmm, qué frío eres, onii-chan.
—Oye, ¿no deberíamos ir a dormir pronto? Ya hemos estado hablando bastante.
—Eh, ¿todavía no tengo sueño en absoluto? ¿Ya terminamos de hablar?
—En realidad, si seguimos hablando, no podremos dormir, ¿verdad?
Por supuesto, hay muchas cosas que quiero saber.
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Cosas que quiero preguntar. Cosas que quiero conocer.
Sobre KokoPyon. Y sobre Ichinose Ryokaze.
Después de todo, es una entrevista exclusiva. Si los fans de Kokoro Pyonpyonsan lo descubren, o si los amigos A y B lo descubren, sin duda enfrentaré una
situación de linchamiento.
Pero bueno.
Vamos a dormir, es comprensible.
Hoy ha sido un día agotador con demasiadas cosas sucediendo.
—Hmm. ¿Realmente te vas a dormir?
—Sí, me voy a dormir. Mañana también hay clases.
—Hmm.
Se ve insatisfecha.
Desde mi posición, tumbado boca arriba, no puedo ver qué está sucediendo
abajo.
La presión de un interlocutor invisible es más fácil de manejar. Incluso si la otra
persona es una chica gal, puedo contraargumentar un poco. Además, está
oscuro y no se ve muy bien.
Pensaba en eso cuando,
—Oye, oye.
Me sobresalté.
Porque se inclinó hacia adelante.
Asomándose desde abajo, mirándome desde abajo.
Ichinose Ryokaze está vestida con su pijama.
Y es uno bastante ligero con un escote bastante abierto.
La sensación de sus grandes senos y el débil escote que se asoma un poco.
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Se puede ver. Incluso en esta oscuridad, con los ojos de un estudiante de
secundaria.
—¿Q-Qué pasa?
Pregunto nervioso.
Ella sonríe mientras responde.
—¿No vas a hacer nada más?
—¿Eh?
—¿Realmente solo vas a hacer la entrevista? ¿No vas a hacer nada más?
Estamos solos, después de todo.
Hyuh, y entonces.
Un extraño sonido escapó de mi garganta.
La sonrisa de Ichinose Ryokaze, que emerge en la penumbra, era increíblemente
seductora.
Una “invitación” disfrazada de pregunta.
¿Cierto?
¿No es solo mi malentendido?
El que no come en la mesa servida, ¿qué es eso?
Un festín desperdiciado desde un estante.
Si eres un hombre, deberías actuar en este momento, ¿verdad? Eso sería lo
normal.
Eso sería lo normal.
—Pues no haré nada.
Hubo un silencio después de mi respuesta.
—No entiendo, ¿por qué?
Ichinose Ryokaze tiende a ser bastante lacónica en sus palabras. Frases cortas.
Directa al punto. Golpea el núcleo y luego espera con una sonrisa la reacción de
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los demás. Es este tipo de personaje el que la convierte en la líder de las chicas
gal y en una talentosa y prometedora dibujante.
—Es difícil de expresar con palabras.
Elegí mis palabras cuidadosamente.
Ojo por ojo, pero al revés.
Cuando tu interlocutor no es muy elocuente, debes expresarte con palabras.
Es la sabiduría de la vida que me enseñó mi padre, quien no era muy habilidoso
con las palabras.
—Hablando en términos generales… siento que nos lastimaríamos mutuamente.
—Woah. Lo dices en serio.
—¿Es malo ser serio?
—No, para nada.
Sonríe más profundamente.
Mirándome desde arriba de la cama, Ichinose Ryokaze dijo esto.
—Después de todo, eres la persona que pensé que eras.
—… ¿Qué quieres decir?
—O más bien, eres un poco pervertido, ¿verdad?
—¡No quiero que me lo digas tú!
—Pero lo imaginaste, ¿verdad? Cosas pervertidas.
—Bueno, es que, si te dicen algo así, cualquiera…
—Además, somos hermanos, ¿verdad? No podemos hacer cosas pervertidas.
Lo dije antes. Nada de cosas pervertidas, ¿vale?
¡Por supuesto!
En teoría, sí.
En mi mente, hice una crítica total.
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Aunque no podría ponerme al día con todas sus cosas. Al ser arrastrado por su
ritmo, pierdo completamente la concentración… de hecho, ¿no era así? Ichinose
Ryokaze se convirtió en mi hermanastra. La intensidad de la conexión entre
Ichinose Ryokaze y Kokoro Pyonpyon-san es tan fuerte que es fácil olvidarlo
accidentalmente.
Más bien, es porque, desde el punto de vista del registro familiar, somos una
familia, ¿no? Ser hermanos no impide hacer cosas íntimas, así que ese tipo de
lógica no aplica, ¿verdad?
—No, en serio. Vamos a dormir. La conversación ya ha llegado a ese punto,
¿verdad?
—Hmm, ¿de verdad?
—Sí, apostaría por ello.
—Bien, entonces, solo una cosa más.
—No, ya deberíamos ir a dormir…
—Sabes, tengo un pequeño secreto. ¿No quieres saberlo?
—…
¡Este tipo de cosas otra vez!
¡Ella va a seguir con esto de todas formas!
¿Realmente no tiene intenciones de dejarme dormir?
Y además, ¿no parece que está alargando la conversación de una manera
despiadada?
—… ¿Qué tipo de secreto?
—¿Estás intrigado?
—Eres parte de mi familia, ¿verdad? Entonces, debería importarme, ¿no?
—Jaja. Manejas bien las respuestas.
Se rió un poco antes de continuar,
—Bueno, hay varios secretos grandes. Y muchos pequeños secretos.
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—Entonces, en resumen, ¿mucha información, verdad?
—Sí.
—Si hay tantos secretos, ya ni siquiera tiene sentido preocuparse, ¿verdad?
—Pero soy Kokoro Pyonpyon. ¿No eres tú quien admira mis ilustraciones, oniichan? Y además, vivimos bajo el mismo techo como familia. ¿No sería imposible
que no te importe?
¡Bueno, sí!
Así es, ¿verdad?
Sin poder ocultar nada, levanto la bandera blanca.
—Entonces, cuéntame. Comencemos con el secreto más grande.
—Hmm. Ese es realmente un secreto. No lo diré.
—¿¡Después de hacerme esperar tanto!?
—Todo tiene su orden. Primero, los pequeños secretos, ¿de acuerdo?
—Sí, sí, entendido… Entonces, ¿puedo preguntar sobre uno de esos muchos
pequeños secretos, Ichinose-san?
La llamé por su nombre mientras juntaba las manos en señal de súplica.
Ryokaze, con una expresión feliz, dijo: “Ah, me llamaste por mi nombre”. Luego,
con entusiasmo, añadió: “Entonces, te contaré un secreto. ¿Está bien?”.
—Sí, por supuesto. ¿De qué se trata?
—Soy del tipo que no puede despertar por la mañana si la persona con la que
duermo no está cerca”, dijo con una sonrisa. “Además, soy del tipo que no duda
en depender de alguien en quien confía”.
—… ¿Qué significa eso?
—Significa que…
Se rió suavemente y continuó, “Creo que no puedo despertar por la mañana ni
hacer nada para prepararme si no estoy contigo. Cocinar el desayuno,
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prepararme para ir a la escuela y otras cosas. Así que, estaría feliz si me
ayudaras, onii-chan”.
—Lo haré, te ayudaré.
—Sí.
—Bueno, ¿en qué nivel estaríamos? Puedo despertarte por la mañana y
preparar el desayuno, eso es algo que puedo hacer normalmente.
—Bueno, algo más que eso, ¿quizás?
—¿Concretamente que?
—Pasar el peine por mi cabello, secarlo…
—¿Eh? ¿Desde ahí?
—También maquillaje, por favor…
—No, no, ahí no. Eres una chica gal, ¿verdad? Deberías hacer eso tú misma…
—También quiero que me cambies la ropa…
—¿Eso no entra en la categoría de “cosas pervertidas”?
—También quiero que me cepilles los dientes…
—¿¡De verdad no puedes hacer nada!?
¡O más bien, no quieres hacerlo! ¿Hasta dónde piensas llegar? ¡Esto es nivel de
cuidado necesario!
—Pero, onii-chan, pareces alguien en quien se puede confiar. Sería genial poder
confiar en ti, ¿sabes?
—No, no, ¡no está bien! ¡Piensa en la lógica común!
—¿De verdad no está bien?
Me lo pidió de una manera tan linda.
No, no, no está bien.
Cuando me miran así – ya de por sí ella es una chica gal, y además, cuando
alguien a quien idolatro como el dios de las ilustraciones me pide algo así – es
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una tristeza por la naturaleza masculina, o tal vez la tristeza de haber adquirido
gustos otaku.
No puedo decir absolutamente que no.
Es realmente triste.