A story of taking home a lonely gal from my class and turning her into an elegant beauty - Capitulo 1
Todo chico saludable de preparatoria ha fantaseado con vivir con una chica alguna vez.
Probablemente con la chica a la que ama o la más popular de la escuela. Puede que quizá, de repente te encuentres viviendo con una hermanastra, O quizá, con una hermosa y rica onee-san que vive en tu vecindario.
Sería algo salido de un drama o manga, una juvenil fantasía.
No hay nada de malo en eso.
Es un rito por el que pasa todo adolescente.
Y si me preguntaras a mi si nunca he tenido ese tipo de fantasías, diría esto, por supuesto que las tengo.
Fueron más veces de las que puedo contar con los dedos de ambas manos y pies juntos. Y mientras tenía esas fantasías. Me emocionaba tanto que no podía dormir por las noches, pero cuando llegaba el amanecer, me sentía vacío.
Estoy seguro de que casi todas las personas de mi edad pueden entender ese sentimiento de vacío que te hace querer morir.
Dejando de lado mi triste historia por un momento.
Hay personas afuera quienes, de hecho, viven junto a chicas de las cuales todos deseamos, y a todas esas personas me gustaría enviarles una bomba con mis cumplidos. Boom, ¡tu normie!, ¡Hijo de perra!
Había estado celoso de esos chicos, yo anhelaba vivir con una linda chica, porque es un sueño para cualquiera.
Si alguna vez eso pasara, esperaba fuera cuando fuera lo suficientemente grande y pudiera tener una novia.
Así era como lo imaginaba…
—Aquí estamos. Entra por favor.
—Disculpa las molestias…
Nunca se me hubiera ocurrido pensar que estaría en esta posición tan envidiada.
—De todas formas, deberías de tomar una ducha. Um, aquí esta una toalla y… aquí está un cambio de ropa si quieres usarlo, el baño está a la izquierda terminando el pasillo. Siéntete libre de usar el champo o cualquier cosa que necesites.
No podía dejar que estuviera empapada por siempre. Así que decidí dejarla tomar un baño.
—Gracias…
—Está bien. Tomate tu tiempo.
Entonces di un grito mientras Sotome-san caminaba hacia el baño.
—…No, espera, ¿Qué estoy haciendo?
Toda la sala resonó con las cosas que estaba diciendo.
Aun si somos compañeros, seria loco dejar que una chica a la que realmente no conozco entre a mi casa.
Pero ya que inesperadamente no pude contenerme y le dije. -¿Te gustaría venir a mi casa?
Estaba sorprendido de haber tenido el coraje de decir tal cosa tan audaz.
No pensé que realmente me seguiría, pero…
Siento que por ahora las cosas han estado fluyendo bastante bien, aunque eso depende de cómo lo veas.
Una vez leí un artículo en una revista…
Aparentemente, si invitas a una chica a tu casa y ella acepta, está bien que hagan eso y esto.
“¡…No, eso no puede ser verdad! ¡Absolutamente no!”
Aunque así fuera, debe de haber algún tipo de trampa.
Si buscas en Internet, encontrarás muchas historias de personas que creían en el “dicho” de que es una vergüenza que un hombre no tome lo que está sobre la mesa, para que al final tengan que ser llevados a la estación de policía pues las chicas nunca dieron su consentimiento, terminando con sus vidas arruinadas.
Probablemente sea mi caso si no tengo cuidado. Me imagino siendo interrogado por el oficial de policía.
—Estoy tan celoso de que tengas a una chica tan joven en tu casa
—No, eso no es, no intentaba hacer nada malo.
—Mientes, calculaste cada milímetro ¿No es así?
—Seh, cada milímetro, bueno…
—Arrestado★
La posibilidad de que sea interrogado en el nombre de la ley es terrorífica, eh escuchado que hoy en día, te pueden reportar solo por hablar con un niño perdido.
Eh estado pensando que el mundo es muy duro, pero no creo que pueda salirme con la mía si demoro en responder si tengo o no alguna mala intención.
Adiós a mi juventud, ten mejor suerte en la siguiente vida.
—…De cualquier forma, hagamos la cena o cualquier otra cosa estúpida.
Quizá porque es estúpido.
Estoy relativamente más calmado.
Ahh, me calmé y pensé en cómo preparar la cena.
En primer lugar, mis preferencias no encajan con una gal rubia, pero si es gentil, de belleza inocente… ¡Eso no es en lo que debería de estar pensando ahora!
Bueno, podría ser inapropiado no preguntar acerca de su situación antes de pensar en que debería de hacer.
Al terminar de cocinar, escuche que la puerta del baño se abría.
El sonido de la secadora de pelo resonó por toda la sala, puse la cena sobre la mesa.
No sabía que era lo que pasaba, pero he oído que las personas se desesperan cuando tienen hambre, de cualquier forma, después de que termine de cenar y se relaje, puede que quiera contarme una o dos cosas.
Bueno, puede que sea capaz o no de hacer algo acerca de eso.
Eso fue lo que pensé, Sotome-san regreso a la sala.
—Gracias por el baño.
—No es nada…
Miré a Sotome-san y no pude evitar emocionarme.
Su largo y húmedo pelo.
Sus mejillas levemente enrojecidas por el calor.
Pero más que nada, no pude evitar sentirme conmocionado por el romanticismo que da el ver la inusual vista de una chica usando su ropa. El simple hecho de que este usando mi ropa es demasiado bueno para ser verdad.
¡Hubiera sido aún mejor si simplemente usara una camisa blanca…!
—¿Pasa algo?
—¡Ah, no, no es nada!
Trate de apartar la mirada y lucir lo más tranquilo posible, tratando de que no se diera cuenta de lo que estaba pasando por mi cabeza.
Di un gran suspiro, puse en orden mis pensamientos, sonreí y le dije.
—La cena esta lista, ¿Por qué no tomas asiento?
—Lo siento… por todo.
—No te preocupes por eso.
Nos sentamos uno frente al otro, Sotome-san tomo una cucharada y lentamente la llevo a su boca.
—Es muy bueno…
Finalmente pude ver algo de vida en su rostro mientras murmuraba.
—Eres un buen cocinero Akamori-kun.
—Solamente freí el arroz.
Esto ocurrió en una ocasión cuando fui transferido.
Nunca había hablado con ella antes y ya que siempre ha estado sola en la escuela aun siendo una gal, me la imaginaba fría y que si me involucraba con ella tendría problemas, pero sorpresivamente hablamos con normalidad.
Creo que haber tenido el baño y esta cena le ayudo a calmarse un poco.
No sabía si aun con eso Sotome-san iba a querer contarme que había pasado, pero quizá simplemente significaba que no debía de estar tan nervioso.
Bueno, antes de preguntarle, le conté un poco sobre mí.
—Pienso que me he vuelto un poco mejor en la cocina desde que empecé a vivir solo.
—¿Vives solo?
Sotome-san miro por la casa con sorpresa.
No eran más que los muebles y electrodomésticos necesarios de una casa en la que vive una sola persona.
Viendo esa escena, Sotome-san volteo su mirada a mí con un poco de confianza.
—Temporalmente estoy viviendo solo. Mi padre fue transferido después de que pasara mi examen de admisión, es por eso que mi madre y mi hermana se mudaron con él, y yo me quedé aquí ya que no pude transferirme, pero es por eso que decidí hacerlo el siguiente año.
—Con que es así…
—Entonces, si no te importa, me gustaría saber que paso.
Puse mi cuchara sobre la mesa y miré a Sotome-san.
—No te forzare a hablar de eso si no quieres, y si lo haces, no se lo diré a nadie, de cualquier forma seré transferido, así que no tengo motivo alguno para contar tu historia, Sotome-san… ¿a qué te refieres con que ya no tienes más un hogar?
Cuando le pregunte, Sotome-san cerro su boca y frunció el ceño.
—Mi hogar…
Después de un rato, dijo,
Mis padres se divorciaron cuando era niña, así que hasta ahora había estado viviendo con mi madre, nosotras somos pobres, por eso decidí tomar un descanso de la escuela y empecé a trabajar a medio tiempo después de entrar a la preparatoria, esperando ayudarle por lo menos un poco con el dinero, pero… cuando volvía del trabajo hace unos días, mi madre ya no estaba.
—¿Dejo alguna nota… diciendo que se iría?
—No dejo ninguna nota, pienso que quizá se escapó con ese chicho. El tipo que era su novio hace un tiempo.
Dijo eso con un poco de disgusto.
Quería golpearme en la cara por las fantasías que estaba teniendo hasta hace un momento.
—Después de eso, el casero me dijo que iba atrasada con la renta, y desde entonces no tengo esperanzas en poder pagarla, deje el apartamento solo con las cosas necesarias. No tuve otra opción más que quedarme en el parque ya que no tenía el dinero, y tampoco me habían pagado del trabajo todavía.
No puede ser, que locura.
Como puede su madre irse con un hombre justo cuando su hija acaba de entrar a la preparatoria y que también tiene un trabajo de medio tiempo para ayudarla a llegar a fin de mes.
Me sentí enfermo al oírlo, dejar solo a un familiar.
—¿Qué estás haciendo ahora?
No podía controlar las emociones que estaba teniendo
Pero pude mantener la compostura para preguntarle.
—No lo sé… ¿Qué debería hacer?
Su voz sonó un poco temblorosa mientras se cuestionaba a sí misma, tomo un respiro.
—Si no tienes ningún lugar al que ir, ¿Te gustaría vivir aquí por un tiempo?
—¿Eh…?
Sotome-san me miro sorprendida, sacudió su cabeza levemente.
—Ya te he causado muchos problemas, vivir simplemente aquí en tu casa… no podría hacerlo.
Esa fue una respuesta bastante natural de su parte.
Aun que estuviéramos en la misma clase y nos conociéramos el uno al otro, incluso aunque ella este teniendo problemas encontrando un lugar para vivir, ninguna chica aceptaría la propuesta de vivir con un chico que vive solo si le preguntase que viva con el de la nada.
Debe de estar avergonzada, apenada, pero lo más importante, debe de estar más cautelosa.
—No es una molestia del todo.
Pero tuve que decirlo al ver a Sotome-san confundida.
No es mi problema, así que podría solo dejarla sola, es una locura involucrarse en los asuntos familiares de alguien.
Como estudiante de preparatoria, no hay mucho en lo que pueda ayudar.
Entiendo eso.
Pero cuando oí la situación en la que se encuentra Sotome-san, no puedo simplemente dejarla sola.
La razón por la que me siento con esa necesidad es probablemente porque me recuerda a… cierta chica.
Un recuerdo del jardín de niños, que había olvidado hasta hace unos cuantos minutos atrás.
En esa época, estaba enamorado de esa chica.
Ella siempre estaba sola en una esquina del salón de clases y rara vez respondía cuando le hablaban, extrañamente levantaba mi interés y… antes de saberlo, ya estaba enamorado de ella.
Cuando vi a Sotome-san en el parque, no pude evitar ver la figura de aquella chica en ella.
Quizá incluso ahora aun me arrepiento de no haber hecho nada por esa chica.
—No voy a preguntarte nada extraño solamente porque te esté dejando quedarte en mi casa. Tengo un cuarto vacío, así que siéntete libre de usarlo. Por supuesto, como dije antes, no le diré a nadie nada acerca de tu situación sin tu permiso. Ya sabes lo que dice, “en tiempos difíciles, debemos ayudarnos los unos a los otros” ¿Cierto?
Era consciente de que estaba tratando de retenerla, pero sabía que, si la abandonaba aquí, me arrepentiría tanto como esa vez.
—Estas seguro de que quieres que…?
—Seguro.
Sotome-san sacudió su cabeza.
—Entonces, ¿Podría estar a tu cuidado por un tiempo?
Por supuesto.
Y es así dio comienzo nuestra vida juntos.
—Pero hay una cosa de la cual quiero que me prometas.
—¿Prometa?
—No tienes que pagarme la renta, es por eso que quiero que vayas a tu trabajo con moderación y asistas todos los días a clases. Yo me hare cargo de los gastos de manutención, así que puedes volver a tu vida normal.
Después de pensarlo un momento, dijo,
—Entiendo, Gracias.
Tenía una mirada de disculpa en su rostro.
Y no pude sacar esa mirada de mi mente por un tiempo.
A la mañana siguiente, me desperté más temprano de lo usual para preparar el desayuno.
Desde que empecé a vivir solo, había estado yendo a la escuela sin comer nada antes, porque es una molestia cocinar, pero ahora que estoy viviendo con Sotome-san, simplemente no puedo holgazanear.
No haría todo esto si solamente fuera por mí, pero no debe de ser bueno que Sotome-san se salte el desayuno.
¿Cuándo abra sido la última vez que tuvo un desayuno?
Es lo que pensé mientras probaba la sopa de miso.
No sabía si Sotome-san era una persona de pan o de arroz, así que decidí ir con el arroz por el momento.
Como guarnición hice sopa de miso acompañada de huevos fritos, un poco de verduras y algunas rodajas de pepino. Fue algo bastante simple pero bastante convincente a mi parecer, así es como un desayuno tiene que ser.
Lleve la comida a la mesa y espere a Sotome-san, pero ella no llegaba.
—Me pregunto si Sotome-san abra despertada ya.
Miré al reloj y eran pasadas las 07:00 am
Aún tenemos tiempo, pero ¿Cuándo planea despertar?
Acaso…
Entonces, vino a mí un terrible pensamiento.
¿y si atrapo un resfriado?
No sé cuánto tiempo habrá estado en el parque, pero por lo mojada que estaba, probablemente tuvo que haber sido bastante tiempo. Aun si se calentó en el baño, no debería de ser una sorpresa que tuviera fiebre.
Preocupado, camine hacia el cuarto en donde Sotome-san dormía y escuche cuidadosamente.
No parecía haber sonido alguno dentro del cuarto.
—¿Sotome-san?
Toque a la puerta y le grite, pero no respondió.
Me sentí mal por molestarla mientras dormía, así que abrí la puerta lentamente y entre.
Seguía durmiendo profundamente en la cama.
Mire su rostro por si en verdad se sentía mal, pero parecía estar durmiendo cómodamente. No parecía particularmente pálida ni estaba sudando, no se veía como alguien que estuviese sufriendo.
—Gracias a dios.
Di un suspiro de alivio involuntariamente.
Volteé a verla de nuevo, y pude darme cuenta de que realmente era muy bonita.
Tenía bien balanceado todo en su pequeño rostro, con largas pestañas que resaltaban al tener sus ojos cerrados, sus labios que tenían un leve tono rojizo. Su piel que era tan clara sin alguna mancha o imperfección y que contrastaba con su rubio cabello.
Puede que esta haya sido la primera vez que en mi vida en la que haya visto el rostro de una chica tan cerca.
Viéndola así con ese rostro tierno, realmente no pareciera que fuera una gal.
—¿Nmm…?
¿…?
Mientras estaba admirando su ternura, Sotome-san despertó repentinamente.
Yabai~
Me di cuenta de que, en esta situación, ella podría pensar que estaba espiándola mientras dormía, pero justo ahora no podría tener una justificación.
—¿Dónde?
Mientras se despertaba comenzó a mirar por los alrededores.
Inclino su cabeza hacia un lado y después de un tiempo se percató de mí.
—Akamori-kun… ya veo. Me estoy quedando en tu casa, ¿No es así?
—S-si. ¿Estas bien?
—C-claro. Buenos días…
—B-buenos días.
Aunque ya se había despertado, parecía como si se fuera a volver a dormir en cualquier momento.
Su cabeza estaba temblorosa, y sus ojos cerrados, pero cuando estaba a punto de volver a dormirse,
—El desayuno ésta listo, Estaré esperándote en el comedor. Deberías ir a lavarte la cara.
Si, voy…
Sotome-san se arrastró fuera de la cama y cuando estaba por salir del cuarto,
—¡Ouch!
Se golpeó su frente contra la puerta y dejó salir su voz.
—¿Estás bien…?
—Nmm. Estoy bien.
Después de responder, se froto su frente y se dirigió al baño.
Ya veo. Aparentemente, es un poco distraída por las mañanas.
Un rato después, vino al comedor, pero aún estaba bastante somnolienta.
Aunque… Es un festín para los ojos el poder ver a una chica usando tu propia ropa, ¿No es así?
—Buenos días, ¿Deberíamos comer?
—Si, gracias.
Noa sentamos uno frente al otro como la noche anterior y juntamos nuestras manos.
—Itadakimasu~
—Itadakimasu~
Sotome-san tomo sus palillos y le dio un gran bocado a la sopa de miso.
—No tenía idea de si preferías pan o arroz en las mañanas, así que solo elegí el arroz.
—Prefiero el arroz.
—…Ya veo. Eso es bueno.
Después de unos cuantos minutos de que comenzáramos a hablar, nos quedamos en silencio.
—…
¿Qué se supone que deba hacer…? Esto es incómodo.
¡Independientemente de si ella es una gal o no!
Ayer, Fui capaz de poder entablar una conversación normal con ella por la incertidumbre de lo que iba a pasar, pero ahora que estamos cara a cara de nuevo, me sentí incomodo. Y parece ser que Sotome-san se siente de la misma manera, aun así, simplemente seguimos comiendo nuestra comida sin entablar conversación.
Era de esperarse.
Aun si nos conocíamos el uno al otro, ayer fue la primera vez que hablamos.
Me he estado haciendo la misma pregunta desde ayer, ¿Es esto realmente lo mejor?
De cualquier forma, el cuarto que actualmente está usando Sotome-san era de mi hermana, y naturalmente, ella está durmiendo en su cama.
Creo que es natural fantasear imaginándose terminar durmiendo en la misma cama que una chica, pero me gustaría decirles a todos los chicos de secundaria y preparatoria quienes tienen estas mismas fantasías,
¡Realmente no es tan dulce!
No hay manera en la que pudiera tener el coraje de pedirle dormir juntos a la chica en primer lugar.
Si tuviera las agallas para hacerlo, no estaría fantaseando sobre eso, y ya habría tenido alguna novia, eso es triste.
Bueno, dejando eso de lado, cuando mi familia se mudó, pensamos de hecho en que debería de haber alguien que viniera a verme regularmente así que dejaron una cama y algunas cosas esenciales para una persona.
Aunque pienso que eso ya no será necesario.
—Gracias por la comida, Akamori-san. ¿No comerás?
—Oh no. También comeré un poco.
Estaba tan centrado en mis estúpidas fantasías que olvide comer.
Rápidamente llevé un bocado a mi boca, pero me sentí culpable por lo que no pude saborearlo.
—Después del desayuno, podemos empezar a preparémonos para la escuela. Como no puedo ir contigo me iré un poco más temprano, así que puedes tomarte tu tiempo para llegar.
—Pero mi uniforme… Sigue mojado por la lluvia.
—Lo lave anoche y lo puse en la secadora.
Señale a la esquina del cuarto mientras se lo decía.
Ahí estaba el uniforme de Sotome-san, limpio y seco.
—Gracias… Akamori-kun, puedes hacerlo todo.
—Eso es solo porque tengo que hacerlo, en la secundaria no podía hacer nada de quehaceres, por eso fue un poco duro cuando empecé a vivir solo. Pero una vez que lo haces, sorpresivamente aprendes las cosas rápido. En fin, Sotome-san, no te preocupes por el futuro. Lo que tenga que pasar pasará.
—Si. Espero que tengas razón.
Sonreí y traté de decir algo para aliviar el ambiente.
Sotome-san me devolvió la sonrisa con otra pequeña, pero un poco incomoda.
—Ah, déjame darte tus cosas.
Puse la llave sobre la mesa.
—¿Esto
Es una copia de la llave de la casa.
—¿Estas seguro?
Estaremos viviendo juntos por un tiempo, entonces, ¿Por qué no?, No puedo estar siempre en la casa para poder abrirte. Ahora, cuando vayas a la escuela más tarde, necesitare que pongas el seguro.
Si… Entiendo.
El darle la llave de la casa me hizo sentir que estábamos empezando una nueva vida viviendo juntos.
—Además, tengo una sugerencia, ¿Por qué no dejamos de llamarnos por nuestros apellidos?
—¿Qué?
—Ya que estaremos viviendo juntos por momento, no es como que tengamos que ser extraños, ¿Cierto? Puede que de momento sea un poco difícil llamarnos por nuestros nombres, pero pienso que será lo mejor, así que puedes llamarme Akira.
—Claro, eso sería mejor. Puedes llamarme Aoi, también.
Creo que es importante empezar formalmente para ir cerrando la distancia el uno del otro eventualmente.
Y después de que termináramos nuestra comida, comenzamos a prepararnos para la escuela.
La preparatoria en la que estamos, está a unos quince minutos de la casa caminado.
Cuando me estaba preparando para los exámenes de admisión, el elegir una escuela cerca de mi fue uno de los criterios en los que pensé.
Tuve que cambiarme de escuelas muchas veces desde que era niño, y veía que mi padre sufría mucho cuando se quedaba atorado en el tráfico.
Como cuando estábamos en Tokyo, Le tomaba una hora llegar al trabajo en tren。Y en el campo, le tomaba 30 minutos en carro. Dependiendo de la situación, a veces tenía que caminar y tomar el camión para llegar al trabajo, ese era el reto.
Siento que es una total pérdida de tiempo para llegar a la escuela o al trabajo, es por eso que decidí ingresar a una escuela cercana.
Todo estudiante de preparatoria debe de entender lo placentero que es dormir hasta el último momento, ¿Cierto?
Como sea, ese no será mi caso ahora que empecé a vivir con Aoi-san.
—Akira, Buenos días.
Al llegar a mi salón de clases y sentarme, sentí que se recargaron en mi hombro.
Cuando volteé a ver, vi una figura de un chico conocido.
—Buenos días, Eiji.
Su nombre es Eiji Sazarashi, Un chico atractivo y con aura calmada, él es mi amigo desde la secundaria.
Probablemente te estes preguntando ahora mismo, ¿Cómo puedo decir que nos conocemos desde la secundaria?
Como ya dije hace un momento, mi padre ha sido transferido incontables veces por su trabajo, pero de hecho un tiempo viví por estos rumbos cuando iba en el jardín de niños.
En ese entonces, Eiji y yo íbamos al mismo jardín, y fuimos lo suficientemente cercanos como para que empezásemos a jugar juntos.
Cuando regresé en mi primer año de secundaria, volví a verlo después de un par de años, pero ya que él se volvió bastante decente no pude darme cuenta de que era el hasta que me hablo.
—¿Huh? ¿No estarás con Izumi hoy?
—Estaba con ella, pero tuvo que irse por que tenía que hacer unos papeleos.
Izumi que no está ahora mismo y Eiji son novios.
Empezaron a salir desde la secundaria. Y desde entonces siempre llegan juntos.
Es por eso que todo mundo los conoce, pero ahora que entraron a preparatoria, siguen coqueteando sin preocupación alguna, y ya hasta son reconocidos como más notoria pareja en toda la escuela.
Me gustaría que se pusiera en mis zapatos y pudiera verse de primera mano.
Entonces, ¿Qué tipo de chica será la novia de Eiji?
—Eiji-kun, he regresado.♪
Al mismo tiempo en el que se escuchaba una alegre voz, una chica abrazo a Eiji.
Una chica bastante linda, de cabello corto y de un café natural, sus ojos eran atractivos y bajos. Sin duda, este es el estilo encantador de una chica de preparatoria en primavera, y ahora también, la novia de Eiji. Izumi Asamiya.
—Bienvenida. Buen trabajo como representante.
—¡Gracias! Mi querido novio es tan dulce~ ¡Te amo!
—Te amo también.
Descaradamente expresando su amor en medio del salón otra vez.
Eiji tomo la cabeza de Izumi mientras ella lo abrazaba y disfrutaba de ser mimada.
Los demás que se encontraban en el salón miraron esa escena que era ya familiar, despreocupada pero alegre.
Dejando eso de lado, Izumi reboza de energía.
Es divertida y se lleva bien con todos en la clase, además, es lo suficientemente responsable como para hacerse cargo de los deberes de una delega de clase. Si algo les pasase a sus amigos, ella siempre iría corriendo a ayudarlos incluso si se encontraran en una terrible situación.
Y desde que comenzó a ser famosa, tanto los maestros como los alumnos la quieren.
Ella es completamente lo opuesto al calmado de Eiji, pero por alguna razón, parece ser que congenian muy bien.
Supongo que será su química.
—¡Oh, Akira-kun, buenos días!
—Acabo de recordar que dijiste algo como eso.
—Hablando de recordar, si, parece que será otro día animado.
Inmediatamente después del expresaste rostro de Azumi, en un abrir y cerrar de ojos su expresión parecía haber perdido el hilo de la conversación, mientras que la puerta del salón se abría.
Se callaron todas las personas que están platicando y la atmosfera cambio drásticamente.
Los ojos de todos se dirigieron a la puerta.
Cuando volteé a ver también, vi a Aoi-san.
—…
Todos la miraban fríamente en silencio, hasta que se oyeron murmureos de -Que raro que venga a la escuela, -¿Cuándo fue la última vez que estuvo aquí?, -Había olvidado que ella estudiaba aquí, etc… Ese tipo de cosas se escucharon por todo el salón.
Naturalmente, Aoi-san podía oírlo también, pero no le tomo importancia y busco su asiento.
Todos continuaron con sus charlas como si nada hubiera pasado.
Gracias a la reacción por parte de todos, pudimos ver en qué clase de posición se encuentra.
Silenciosamente vi la escena con Eiji e Izumi.
—Ha pasado un buen tiempo desde que viene a la escuela.
—Estaba preocupada por ella desde que empezó a faltar regularmente, me alegra verla de nuevo.
Izumi dio un suspiro de alivio.
—Iré a hablar con ella.
—Claro, diviértete.
¡Aoi-san! Buenos días.♪
Izumi llamo a Aoi-san sin preocuparse de las miradas que podría tener.
—…Buenos días.
Aoi-san respondió con una sola palabra y decidido actuar desinteresada en hablar con Izumi.
Ella es una solitaria gal rubia. Es como si hablar en casa normalmente fuera una mentira.
—Es bueno verte aquí. ¿Cómo has estado?
—…Bien.
—¡Ya veo! Bien es lo mejor, ¿No es así?
Izumi siempre a sido alguien de mentalidad fuerte, es por eso que es capaz de mantener la conversación con una sonrisa.
Mirando esa cotidiana escena, repentinamente pensé sobre el futuro.
Ella esta viviendo en mi casa así que estará bien por un tiempo. Al menos hasta que sea transferido a una nueva escuela. Aoi-san no tendrá ningún problema en encontrar otro lugar en donde quedarse estoy seguro.
Ya que ahora mismo tiene problemas de dinero, podemos manejar lo de vivir juntos si puedo llegar a fin de mes con lo que me dan mis padres.
Aoi-san también esta trabajando a medio tiempo así que seguramente será capaz de pagarme eventualmente.
Pero…
¿Qué pasara después de que me transfieran?
Espero que ella sea capaz de encontrar algún lugar en donde quedarse, pero, ¿Y si no puede?
Perderá otra vez un lugar en donde vivir, y tampoco podrá ir más a la escuela.
Si las cosas se tornan de ese modo, puede que no haya nadie que pueda ayudarla.
Mucho menos alguien que esté dispuesto a ofrecerle un lugar.
No será fácil que nuestros compañeros la acepten, aun si Izumi trata de ayudarla, no servirá de nada si Aoi-san no se abre a ella.
Es igual que con los maestros o con nuestros demás compañeros.
Ella es una rubia gal que nunca asiste a clase, y por supuesto, su relación con los maestros no es la mejor.
—¿Estas tan preocupado por Aoi-san?
Me quede viendo a Aoi-san sin darme cuenta.
—Ah, no… no es eso.
—Entonces, ¿Qué pasa?
—Ella iba en la misma secundaria que nosotros, ¿Cierto? Me refiero a Aoi-san.
—Si, así es.
—Nunca tuve realmente algún contacto con ella, y realmente no la conocía hasta que fui transferido a la misma secundaria en primer año, pero me pregunto si ella ya era así desde ese entonces.
—Ni Izumi ni yo habíamos estado en la misma clase que ella, así que no conocemos los detalles, pero pareciera que fue hasta la preparatoria que se convirtió en una gal. Siempre estaba sola en el pasado, así que he oído lo mismo de siempre.
—Ya veo…
Di una respuesta floja y volteé mi atención a Aoi-san de nuevo.
—…Bueno, si necesitas ayuda, puedes hablarme en cualquier momento.
—No tengo ningún problema, pero gracias.
Después de eso, sonó la campana y empezaron las clases.
Pase toda la clase pensando en que es lo que debería de hacer.
.
.
.
Fin del capítulo 01.